SAMAÍN EN GALICIA
La
tradición de la cena muda que originalmente se celebra en estas
fechas, con el transcurrir de los siglos en muchos lugares se movió
al solsticio de invierno y la navidad cristiana, pero como digo es
una tradición de tiempo de magosto, y más en concreto “da noite
das animas”, Samaín. La cena muda consiste en invitar a nuestros
ancestros a la mesa, poniéndole plato, silla, comida y bebida, según
reza la tradición la comida no deben tocarla los vivos si no que ha
de ser devuelta a la tierra al día siguiente. Para aquellos
espíritus que cruzan a esta realidad pero que no tienen a nadie que
los espere aquí, les dejamos como ofrendas manzanas en las ventanas
y puertas de casa. Para ofrendas aquellos ancestros que no cruzan o
que no van a ser invitados, la tradición en Galicia nos habla de que
debemos lanzar la comida y bebida al fuego, de esta manera llega
hasta ellos. Una bonita tradición que compartimos con otros países
celtas, es
la de tiznarnos la cara con el carbón de la hoguera de Samaín, así
espantamos al miedo y despistamos a la Santa compaña. Es costumbre
dejar luces, como candiles o velas, en los cruces de caminos, esta es
una manera de guiar y alumbrar a las ánimas, con el paso del tiempo
también esta tradición fue cristianizada, muy posiblemente este sea
el origen de los cruceiros de Galicia. Para los que rechazan la idea
de las calabazas y la celebración pagana de estos días, recordarles
que en galicia muchas de nuestras abuelas y madres aún recuerdan
vaciar cabazas, calacús, nabos, para alumbrarlas la noche de ánimas.
Que lo de disfrazarse de algo lúgubre también viene de lejos y como
decía es una manera de espantar al miedo y pasar desapercibidos,
esta fiesta no es una importación, no es algo que hemos adoptado de
fuera, si no que es una exportación, y que son los demás los que lo
han adoptado, pero claro, es que nuestra memoria como pueblo es muy
frágil.
Zeltía
La Meiga.
Copyright©2019
*Imagen
de: A sombra de Bouza Panda.
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