ALECRÍN

Esta pequeña y luminosa flor amarilla nace entre los espinos del retamo espinoso también llamado toxo en tierras galaicas,tiene otros nombres como aliaga, aulaga, y en mi tierra Galicia se la llama xorima o alecrín. 
Ya en la antigua Europa apreciaban mucho este arbusto espinoso que florece desde febrero hasta comienzos de junio. Era y es el reflejo del joven héroe solar, cuyas afiladas armas han vencido al duro y helado invierno, existía la costumbre que perduro relativamente hasta hace poco tiempo de quemar estos arbustos espinosos en el equinoccio primaveral para fertilizar la tierra.
Sus flores son reflejo de superación, de alegría frente a la adversidad, simbolizan la renovación, el avance, el crecimiento, el equilibrio entre luz y oscuridad, y alejan la maldad.
Ayudan a superar el desaliento y la desesperanza, a vencer los obstáculos cuando todo parece perdido. Está recomendada para todos aquellos que carecen de fe en la vida y se sienten tentados de rendirse. Ayuda a romper los círculos viciosos y avanzar.
Este pequeño colgante porta un alecrín recogido y secado por mí. Quien lo lleve se beneficiará de todas sus propiedades, y además es monísimo.

Zeltía La Loba. Copyright©



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